Manual de seguridad
Por lo explicado hasta aquí, es evidente que la seguridad laboral es ineludible en cualquier laboratorio. Y por eso la normativa la recoge como obligatoria. Es necesario que cada laboratorio elabore un plan de seguridad, que evalúe los riesgos y que revise el cumplimiento de las medidas de seguridad en cada uno de los trabajos, garantizando la seguridad de los trabajadores. Todos estos datos se recogerán en el denominado manual de seguridad.
El manual de seguridad es un documento de trabajo en el que se identifican los riesgos conocidos y potenciales del trabajo en el laboratorio y se especifican las prácticas y los procedimientos encaminados a eliminar o reducir al mínimo estos riesgos.
El responsable de seguridad del laboratorio es el director del laboratorio, quien deberá informar a los trabajadores y velar para que cumplan las normas de seguridad establecidas en el manual. Cada trabajador deberá conocer y comprender los riesgos que se derivan de su actividad y actuar en consecuencia para prevenirlos o minimizarlos. Además, deberá poseer la cualificación necesaria para las tareas que desempeña en el laboratorio, los conocimientos concretos adecuados y disposición a hacer bien el trabajo.
Por otra parte ninguno de los profesionales que trabajan en el laboratorio debe suponer que sus compañeros ya conocen las formas seguras de trabajar y que las seguirán, sino que, al contrario, deben verificar una vez y otra que el trabajo se lleva realmente a cabo de forma correcta y segura. La desidia para cumplir la medidas de seguridad puede acarrear graves problemas al profesional descuidado o negligente, a otros trabajadores y al director del laboratorio.
